Palabras Finales

Hemos tratado, a modo general, de mostrar a la luz de la Biblia algunas de las doctrinas fundamentales que los “Testigos” llevan de casa en casa. Reconociendo que en magnitud de prédicas en el terreno, muchas veces nos llevan la delantera real. Los cristianos debemos colocarnos las baterías si queremos llevar y expandir la obra del Señor como Él mandó. Pues, a ser sinceros, creemos que en muchas ocasiones los cristianos nos dormimos en los laureles esperando que otros salgan a predicar. Eso trae consigo que muchas veces esos “otros” no sean los más adecuados para la labor.

De igual manera, reconozca que bajo ningún concepto debemos mirar mal a esas personas ni tratarlos en mala forma. Recuerde que la mejor prédica es la del ejemplo. Dentro de esa Organización hay muchas personas que aman a Dios sinceramente (en su error) pero lo aman aun más que muchos de los que nos llamamos cristianos. En la mayoría de los casos, son almas sedientas de Jesús, por lo que le toca a usted que tiene el amor del Señor llevarle el mensaje que un día le hizo libre y que por misericordia Dios le regaló.

Con el fin de presentar y aclarar muchos puntos doctrinales que en ocasiones los cristianos no quieren adentrarse ya sea por temor a tambalear en la fe, nuestro Ministerio ha tratado de crear este manual sencillo a fin de capacitarlo para que usted pueda un día predicar a una persona confundida por la WST.

Tenga presente, ante todo, que la Verdad absoluta no tiene nombre de denominación ni de una religión, sino que su nombre es Jesucristo. Por tanto, siga Sus caminos, pídale Su dirección y Él seguirá con usted para toda la vida guardándolo de caer en ninguna trampa del enemigo como ha pasado con los miembros de la Torre del vigía de Sion.

Cualquier duda que usted presente puede escribirnos a nuestro correo electrónico: armadosdelaverdad@gmail.com

O dirigirse a la siguiente dirección:

Iglesia Pentecostal Asambleas de Dios.

Calle 55 entre 56 y 54,

Cienfuegos Cuba.

Le atenderemos con mucho gusto.

Que Dios les bendiga en gran manera es nuestro deseo en todo tiempo.